El tiempo y la Literatura: sobre estéticas y movimientos

El libro orgullo y prejuicio, escrito por la autora inglesa Jane Austen (Steventon, Inglaterra, 16 de diciembre de 1775 – Winchester, Inglaterra, 18 de julio de 1817), es la novela más famosa escrita por ella, ganó el segundo lugar al premio de la BBC del “libro más amado del Reino Unido”. Jane Austen es una autora clásica en la literatura inglesa por la ironía que emplea para dotar de comicidad a sus novelas. Escribió varias novelas, todas ellas dentro del contexto de la burguesía agraria y siempre en torno al matrimonio del protagonista. Orgullo y prejuicio fue la segunda novela escrita por Jane. La autora de Orgullo y prejuicio vivió en la época de la regencia del Reino Unido que constituye un puente entre el periodo Georgiano y el Victoriano.  Esta fue la época de  las campañas para la abolición de la esclavitud, de la reforma de las prisiones o de las críticas a la minada justicia social. Fue también la época en la que los intelectuales comenzaron a plantearse políticas de bienestar social, y se construyeron orfanatos, hospitales y escuelas dominicales.

                Además, en la época de Jane Austen no había un sistema educativo completo, siendo que solo las mujeres de una buena clase social podían acceder a la educación, existían escuelas dominicales para mujeres,  y también estaban las denominadas “escuelas para damas” pero tenían muy mala reputación porque la educación “real” que allí se recibía era muy deficiente.

Con Austen surgió un nuevo estilo de novela, que difería de los anteriores en los temas que trataba. Según Richard Whately, en su análisis sobre la técnica y el efecto moral en la ficción de Jane Austen, su obra no altera nuestra credibilidad ni sorprende nuestra imaginación pese a contar con una amplia variedad de incidentes.

Sus novelas contienen un mensaje instructivo, señalan el buen comportamiento y aportan una especie de experiencia ficticia, aunque siempre manteniendo los principios clásicos aristotélicos de verosimilitud, esto es, que sea acorde a la realidad y ofrezca, por consiguiente, una historia donde los elementos que la constituyen se presten a la veracidad de los hechos que se narran.